El Dr. Juan Carlos De Virgiliis es nativo de la ciudad de La Plata, provincia de Buenos Aires.Se recibió de Médico en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata en 1981, y emigró a los Estados Unidos en 1982, en pos de una residencia en Medicina Familiar.  Tras completar dicha residencia en 1986, se unió a la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Carolina del Este, donde enseñó a residentes y estudiantes de Medicina, y pasó los exámenes necesarios para obtener el título de Especialista en Medicina Familiar, que mantendría desde entonces.

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Seguidamente practicó en el ámbito privado en Charlotte, Carolina del Norte, pero su deseo de comprender la interacción entre los factores emocionales y las condiciones físicas de sus pacientes lo llevaron a emprender otros tres años de residencia en Psiquiatría, mientras continuaba trabajando como médico clínico en un hospital rural los fines de semana.

 

Al terminar sus estudios de Medicina Psiquiátrica, abrió la primera práctica de Medicina Integrativa en los Estados Unidos, Total Health Integrated Services, que desarrolló en la mayor clínica primaria de la ciudad de Boone, North Carolina. Dicha práctica ofreció todos los servicios de Clínica Médica, Psiquiatría y Adiccionología, una subespecialidad que el Dr. De Virgiliis abrazó debido a su aspecto espiritual y a su tratamiento de muchos pacientes con dolor crónico, y enfermedades crónicas.

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En su práctica privada, el Dr. De Virgiliis también participó en la docencia, enseñando Medicina Familiar en su clínica a estudiantes de la reconocida Bowman Gray School of Medicine of the University of North Carolina at Wake Forest.  También desarrolló proyectos de investigación originales sobre la aplicación de modalidades de tratamiento de Adiccionología a la terapia de enfermedades crónicas no adictivas.

 

El Dr. De Virgiliis no pudo evitar comprender que, con todas sus capacidades y ventajas, la medicina tradicional se ha convertido en una herramienta excelente para tratar enfermedades, pero se ha distanciado significativamente del tratar seres humanos.

Y a medida que esta divergencia se volvía más y más aparente, sintió la necesidad de investigar los aspectos más próximos a la vida emocional de sus pacientes, a lo que se dedicó desde 2003, hasta que finalmente se le hizo necesario abandonar su exitosa práctica durante la mayor parte de 2010 para entregarse plenamente a entender el aspecto espiritual de la Medicina.

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Convencido de que su experiencia es de inmenso valor, el Dr. De Virgiliis ha regresado a la Argentina, la cuna de su vocación, esperando poder beneficiar a aquellos que quieran ser sus pacientes, y eventualmente, tal vez poder enseñar a una nueva generación de médicos lo que ha aprendido en cuarenta años de educación y ejercicio profesional.

 

Esto no significa que el Dr. De Virgiliis no utiliza medicación ni trata las condiciones médicas del mismo modo que otros médicos.Simplemente, él no se detiene allí, sino que quiere que los pacientes comprendan su condición y tratamiento en detalle, y les ofrece la posibilidad de modificar su propia respuesta a la enfermedad, proveyendo al paciente con la modalidad más poderosa de tratamiento existente.